Por motivo de que un hombre nunca llama. En un post fresco titulado ?Dominacion o sumision?
Livesi Connect
Calendar
May 2024
M T W T F S S
 12345
6789101112
13141516171819
20212223242526
2728293031  

Por motivo de que un hombre nunca llama. En un post fresco titulado ?Dominacion o sumision?

Por motivo de que un hombre nunca llama. En un post fresco titulado ?Dominacion o sumision?

La paradoja del lograr en las relaciones sexuales publicado en el vi­a especializado Psychology Today, el psicologo Ph.D Leon F. Seltzer explica que todo el mundo las seres humanos –junto a varias diferentes especies sobre mamiferos– poseemos circuitos subcorticales para el dominio y no ha transpirado la sumision sexual. En otras palabras, todo el mundo tenemos la probable disposicion, a nivel cerebral, hacia ambos roles. Y no ha transpirado es que los dos clases sobre circuitos, tambien, estan conectados al circuito cerebral del placer, igualmente llamado circuito mesocorticolimbico, conformado por las partes cerebrales en las que se producen las niveles mas altos de dopamina.

El especialista Asimismo da cuenta –respaldandose en la investigacion A Billion Wicked Thoughts: What the la red Tells Us About Sexual Relationships sobre las neurologos Ogi Ogas y no ha transpirado Sai Gaddam– de que la generalidad de estas chicas deben la comunicacion compleja con su afan de acontecer dominantes o sumisas, una demasiado mas problematica que la que suelen experimentar los hombres. En caso de que a lo cual le sumamos que la dialogo respecto a como se es en la intimidad, en contraposicion a como se seri­a en la esfera publica, como En Caso De Que se tratara de una dicotomia absoluta, es una dialogo que se ha vuelto habitual, poniendo en riesgo de que la pregunta por esos roles arrastre la categorizacion fija.

Igual que explica la psicologa y terapeuta de parejas especialista en sexualidad, Daniela Werner, el hecho sobre que se hable sobre dos roles opuestos y no ha transpirado polarizados cuando se acento de sexo tiene que ver con el arquetipo de humanidad que hemos construido. “Asociamos a la sujeto dominante a la que posee permitirse, que hace escuchar su voz y controla la etapa. Versus el o la sumisa que seri­a quien acata a las normas, quien no cuestiona y permite. Ambas, para resumir, proporcionan cuenta de la dinamica sobre conseguir, de un uno sobre el otro. Pero eso acento de el modo en la que nos relacionamos en una humanidad regida por la capacidad. No de este modo en sociedades o comunidades colaborativas, en las que nunca Tenemos jerarquias verticales, sino que mas bien la horizontalidad”.

Aun asi, la doble explica que las relaciones sexuales proporcionan transito a un espacio en el que se muestran ciertas vulnerabilidades y fragilidades, y no ha transpirado en eso seri­a de vital importancia quedar abiertos a la espontaneidad propia sobre ese contexto. “Los humanos somos complejos, poseemos diversas areas y nunca la totalidad de son consistentes entre si ni tendrian por que serlo”. Por lo identico, alguien que puede ser independientemente, empoderado o autonomo hacia fuera, puede pretender presentar mayores exigencias emocionales o jugar al rol del sumiso en la intimidad. Y eso, como explica la doble, no tiene por que ser concebido igual que una cosa gafe.

La psicologa y terapeuta de parejas, Macarena Araos, agrega que los seres humanos tendemos a encasillar y categorizar Con El Fin De conseguir asimilar y no ha transpirado organizar. Pero el peligro esta en que ese disciplina se vuelva rigido. consejos meet an inmate “Si categorizamos sobre una modo en la que esa indole ocurre an acontecer inamovible, dejamos externamente demasiadas posibilidades. En ese sentido, si alguien seri­a resuelto –es afirmar, que seri­a segura o seguro de si tiempo y no ha transpirado sabe lo que quiere–, ?por que seria incoherente que quiera ser sumisa o sumiso en su sexualidad? Entretanto sea consensuado y no ha transpirado conversado, si desea Canjear sobre rol dentro de su ala publico y no ha transpirado su intimidad, no debiese ser algo contradictorio. Cuando se vuelve cronico un rol, ahi seri­a cuando empieza la incomodidad”.

Conforme la doble, el peligro esta en categorizar al otro o categorizarnos a nosotras mismas a semejante aspecto que esas categorias nos inhabiliten sobre permitirse llevar nuestra vida desplazandolo hacia el pelo nuestra sexualidad sobre la modo que queramos, sin tener que atenernos a un unico rol estatico. “La idea no seri­a conocer cualquier, No obstante si abrirnos a las cuestiones: ?Que me agrada? ?Que anhelo? Y no ha transpirado nunca caer en la dicotomia de esto o lo otro. Porque cuando tendemos a categorizar de manera absoluta, tendemos a radicalizar y no ha transpirado polarizar. Sumisa o resuelta. Dos extremidades. Y nos olvidamos que dentro de medio hay bastantes matices”, explica Araos. “Por lo mismo, lo mas trascendente es el autoconocimiento corporal, para no caer en el deber ser de cualquier lo que se nos ha impuesto historicamente a las mujeres”.

Catalina Baeza, psicologa asi­ como terapeuta familiar, explica que entretanto lo que hagamos sea por eleccion o por fantasia y no ha transpirado no por estar sometidas unicamente al pretension del otro –sin meditar el nuestro–, nunca habria un impedimento. Esa supuesta contradiccion nunca se prostitucion sobre la perdida sobre obtener. Se prostitucion de tener suficiente discernimiento personal como para saber que se puede transitar sobre un rol a otro.

Sobre lo contrario, En Caso De Que se es victima de un rol, se crea la problematica.

“Ocuparse de estas propias fantasias siempre asi­ como cuando nunca le generen deterioro ni an uno exacto ni al otro, nunca es un tema. Sin embargo si estamos presas asi­ como nos atenemos obligadamente a un unico rol, alla tendriamos que partir an examinar el imaginario de lo que implica acontecer pasiva –no sumisa– sexualmente. Si en mi vida soy activa, No obstante en la cama me transformo unicamente en pasiva, eso vuelve a obedecer a lo que se asocia a lo mujeril y no ha transpirado a la socializacion de los generos; sobre lo que se espera o no sobre la femina; asi­ como a la idea sobre que si nos comportamos de una determinada manera, podriamos ser juzgadas”, explica Baeza. “Lo complejo es que no tenemos extremadamente claras nuestras fantasias, especialmente las que consideramos que corresponden a la esfera privada y no ha transpirado casi tabu como lo es el sexo”.

Werner explica que hablar de sumisa o dominante facilita que se haga un ranking: somos individuo o lo otro.

“Pero ciertamente podri­amos ser ambas. Seri­a costoso que podamos tener evidente jerarquia de autoconocimiento y maleabilidad Con El Fin De movernos. Quizas ser mas explicitas en lo que deseamos o en ceder el control sobre la posicion a otro, pobre un acuerdo desplazandolo hacia el pelo acuerdo”.